Hierbas anuales o perennes, caulescentes, pulviniformes o rosuladas; tallos laxa o densamente ramificados, híspidos, hirsutos o seríceos. Hojas alternas, pseudopecioladas, subsésiles o sésiles; lámina elíptica, lanceolada, linear, linear-lanceolada, oblanceolada u obovada, cartácea, con pubescencia escabrosa, estrigosa, híspida, pilosa o serícea, generalmente con tricomas de base pustulosa, ápice agudo u obtuso, base atenuada o truncada, en ocasiones decurrente, el margen entero. Flores casmógamas sésiles o subsésiles, dispuestas en cincinos simples y/o compuestos o en glomérulos; ca´liz campanulado, tubular o urceolado, hirsuto, híspido o velutino, lóbulos elípticos, lanceolados, linear-lanceolados u ovados; corola hipocrateriforme, subtubulosa o tubular, lóbulos obovados o redondeados, garganta con 5 fornículos o ausentes, blanca o crema; androceo formado por 5 estambres, anteras ovoideas, sésiles o subsésiles; gineceo 2-carpelar, ovario 2-4-lobado, estilo filiforme, ginobásico, incluso, estigma capitado. Flores cleistógamas, cuando presentes, similares a las casmógamas. Fruto un esquizocarpo formado por 1-4 clusas ovoideas-trígona/s, heteromorfas u homomorfas, blanco-grisáceas, castañas, grisáceas o pardas, cara dorsal lisa y brillante, granulada, tuberculada o con surcos transversales más o menos sinuosos que le confieren un aspecto ruminado, en ocasiones con una cresta longitudinal en la parte media; ginobase piramidal o subulada.
Distribución:
Ge´nero americano conformado por ca. 160 especies (Luebert et al., 2016). En la Argentina crecen 10 especies concentradas principalmente en el centro-oeste del territorio y en la Patagonia; cuatro especies son endémicas de la Argentina.